El Op Art o Arte Óptico es una tendencia artística que surge en los años 60 del siglo XX. Su desarrollo se produce en paralelo al de la abstracción pospictórica y al minimal, con el que comparte el uso de elementos geométricos. Además, tiene sus raíces en las vanguardias históricas y en la Bauhaus.
Se producen algunas manifestaciones de este arte en Estados Unidos, pero su centro principal está en Europa, sobre todo en París.
VEGA III - Victor Vasarely |
El arte óptico parte de la ambigüedad de la percepción para dar energía a pinturas o relieves y crear una variedad de efectos ilusorios en el espectador. Indaga en la interacción con la ilusión y el plano del cuadro, entre entender y ver. Se da la impresión de movimiento, vibraciones, patrones o deformación. Así, en este tipo de obras se requiere la participación activa del espectador, que debe moverse para apreciar el efecto óptico. Por tanto, no existe ningún aspecto emocional en las obras.
Se suelen distinguir tres momentos diferentes aunque no temporales: en el primero se trabaja con obras bidimensionales aunque se buscan efectos de tridimensionalidad; en el segundo se introduce la tercera dimensión, creando una doble superficie o añadiendo otros objetos al cuadro; en el tercer momento ya es la propia obra la que tiene movimiento.
Heredero de las teorías de la vanguardia rusa de unir el arte con la vida, de armonizar arte y ciencia, técnica y sociedad, el Op Art rebasa el campo de las galerías y sale a la calle. Su triunfo es amplio pero efímero.
Como figura principal de este movimiento hay que destacar a Victor Vasarely.