Fachada de la basílica de Santa Maria in Aracoeli, Roma (Italia) Imagen: Miriam Bueno |
Según la leyenda, la iglesia se encuentra en el lugar donde la sibila tiburtina profetizó a Augusto el advenimiento de Cristo poco antes de que muriera. Poco después, el emperador le dedicó a Cristo un altar, el "ara coeli" o "altar del cielo". Más tarde, se enterró en ese lugar a Santa Elena, la madre de Constantino y patrona de la arqueología.
En la Edad Media, la iglesia pasa a manos de los franciscanos, que le dan su aspecto actual.
Como se ha dicho, es una basílica de tres naves separadas por columnas aprovechadas de otros edificios antiguos que sostienen dos filas de arcos.
Artesonado del techo de Santa Maria in Aracoeli Imagen: Miriam Bueno |